La nueva transformación de Goku en Dragon Ball Daima resalta su lado más primitivo y salvaje, acercándolo aún más a su naturaleza Saiyajin y Ozaru. Su cuerpo está casi completamente cubierto de pelaje, sus manos y antebrazos han crecido significativamente, y ha recuperado su cola, lo que refuerza su vínculo con los instintos de su raza.
A diferencia del Super Saiyajin 4 de GT, esta forma en Daima no solo cambia su apariencia, sino también su comportamiento. Goku adopta movimientos más animalescos y agresivos, impulsándose con los brazos y reaccionando con mayor instinto en combate.
Esta transformación no fue lograda por entrenamiento o ira, sino por la magia del Reino Demonio, lo que la hace dependiente de ese entorno.
Su diseño parece inspirado en el Super Saiyajin 4 Limit Breaker de Dragon Ball Heroes, pero con un enfoque más místico. Además, algunos creen que esta transformación podría estar conectada con la visión profética o sueño de Bills, dando una posible explicación a su interés por los Saiyajin en Dragon Ball Super.